12/03/1999
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REALIZA TUS SUEÑOS EN LA VIDA SOCIAL
Prefacio y reconocimiento

En diciembre 1998, cenando en el restaurante del Parador de San Sebastián de la Gomera Ghislaine Bromberger, María de los Angeles Vilasau y yo, María sugirió de repente que los talleres de creatividad de los que Ghislaine y yo hablábamos, especialmente los que se referían a realizar sus sueños, podrían enriquecer la oferta de cursos de verano en la isla. Así comenzó la idea.

Lo que parecía nada más que la presentación de unas páginas para explicar la propuesta, creció por las preguntas que surgían al paso de la realización, hasta un pequeño libro de 34 páginas con explicaciones de nuestra práctica que jamás habían sido escritas de esta manera extensa y explicativa. Al mismo tiempo fue un primer encuentro con los problemas de la transferencia cultural. Lo que era 'desde luego' para nosotros no era así en una cultura latina que exige muchas más 'cartas credenciales' sobre las raíces, las bases y las teorías del fondo antes de actuar y de tomar medidas. Para entender mejor las diferencias culturales del Norte y de Sur de Europa, me había ayudado mucho mis amplias discusiones con Ignacio Darias Castilla, una de las pocas personas de la isla que conocen el Norte no por su propia observación solamente, sino también por su estudio de Germanística en Berlin durante cinco años. Ignacio fue para mi el "culture spanning individual", la persona crucial en la transferencia intercultural como confirman los estudios en este terreno.

Con María, no solamente como mi profesora de español, sino también como primera lectora crítica de las ideas, pasamos muchas horas discutiendo las diferencias culturales para encontrar las palabras adecuadas para decirlo efectivamente en esta cultura. Su apoyo continuó también después de los talleres del verano para preparar los manuales y los cuadernos que no hubieran llegado a tal resultado sin su ayuda.

Una vez La Propuesta finalizada, en Abril, María me presentó a Filiberto Barrera Fragoso de la Asociación Gomara que la aceptó para incorporarla en sus cursos alternativos de verano y salió garante por los gastos de viaje. María Eugenia González Nieves tomó la responsabilidad de imprimir los textos, proporcionando una carpeta sencilla, diseñada con sutileza.

Conocer la Asociación Gomara abrió el camino para encontrar a Moisés Plasencia Martín, también en la junta de la Asociación Gomara, que se mostró muy entusiasta para introducir un taller de este tipo en la isla por su conocimiento detallado de las necesidades y los sufrimientos de la isla. Me explicó Moisés que los cambios fundamentales provocados por el turismo ya han afectado el tejido social hasta el punto de que mucha gente se siente sin rumbo y sin modelos emprendedores, fuera de los puramente económicos, a seguir. Recuerdo con gratitud mis discusiones con Moisés sobre la fineza de las capas sociales en la isla, que conocía con mucho detalle y que eran importantes para introducir este taller. Finalmente tomó la responsabilidad de la dirección del curso y gestionó la subvención económica necesaria (250.000pts) ante La Consejería de Empleo y Asuntos Sociales de Gobierno de Canarias. Interrumpió sus vacaciones en La Palma para realizar el taller personalmente. Su apoyo continuó también después del Taller de Verano en Vallehermoso.

Después de aceptar la idea y fijar las fechas para Agosto, Ghislaine, en Los Países Bajos, se puso a documentar el taller completamente en francés porque este era el idioma para que Moisés pudiera encontrar traductores e intérpretes voluntarios en la isla. Durante el taller fue Nathalie Pochet que, sin experiencia en la traducción simultánea, se hizo responsable de traducir el español de los participantes para Ghislaine. Por experiencia personal conozco la dificultad extrema, poco entendida por los profanos, de traducir 'en vivo' aunque se hablen muy bien los idiomas en cuestión. En el último momento, Moisés pudo introducir a David Pérez-Dionis Chinea para traducir el francés de Ghislaine a los participantes. David lo hizo muy profesionalmente aunque aún no había comenzado su formación como profesional en el terreno de la traducción simultánea. Especialmente para narrar los sueños guiados, que tanto dependen de la sutileza de la palabra, no hubieran sido traducidos con tal calidad sin su ayuda. También después del taller, durante la preparación de esta documentación, David aportó su ayuda --por e-mail por supuesto, porque no ya vive en la isla-- en la traducción final de los sueños y algunos aspectos claves de ésta.

De la organización física, una actividad a menudo ingrata por no ser visible el resultado de todos los esfuerzos del organizador sino cuando falta algo, se hizo responsable Rafael Carmona Martín, Agente de Desarrollo Local, en Vallehermoso.

Había consultas con muchas personas pero me refiero especialmente a las reuniones de consulta que organizó Moisés en Abril en La Dirección Insular de Educación de La Gomera para sondear la opinión de 'otra gente'. Estaban presente: Consuelo Coto, directora de Centro de Profesores de La Gomera, Ignacio Darias Castilla, estudiante-investigador de Política y Sociología, periodista, Monserrat Herrera, Trabajadora Social del EOEP de La Gomera, Domingo Mesa Gonzalez, empresario, Elena Ramos Rodríguez, pedagoga y Orientadora Educativa de Instituto del Enseñanza Secundaria de San Sebastian, María de los Angeles Vilasau, profesora de inglés para los gomeros y de español para los extranjeros y Susana Volkmann, fisioterapeuta y profesora de alemán para los gomeros, residente en la isla desde hace cinco años.

Estoy seguro de que he olvidado a algunas personas que han contribuido fuera de mi horizonte de observación y memoria. Sin embargo las incluyo en mi sentido de agradecimiento y de reconocimiento con las que ya he enumerado anteriormente. Lo que seguramente no voy a olvidar son los participantes quienes, sin querer especialmente ayudarnos, nos apoyaron en gran manera a Ghislaine y a mí. Un taller de este tipo depende, más que un curso tradicional, de la dedicación de los participantes. Por eso, los 'profesores' hemos probablemente aprendido más que los 'alumnos'.
Ghislaine y yo les damos las gracias de todo corazón:
María Arteaga, Rosi Asensio, Rafael Carmona, Adán González, Alicia Mendez, David Pérez-Dionis, Macarena Pineda, Moisés Plasencia, Yael Plasencia, Nathalie Pochet, Yurena Ramos, Alicia Santos, Susana Volkmann.

Lo que he escrito, sin duda, tiene todavía muchos errores del idioma español a pesar de la ayuda que recibí durante todo el trabajo para evitarlos o eliminarlos. Me ayudaron David, Ignacio, Moisés y, sobre todo, María de los Angeles con aspectos diferentes del idioma: la ortografía, locuciónes, frases hechas y el valor cultural de ciertas palabras o distinciones sutiles, como me explicó David muy convincentemente entre el usted/tú español y el vous/tu francés. Sin embargo, las faltas que restan son mías. ¡Perdónenme! Espero el día, en que esta documentación ya no sirve, en que se hayan olvidado los autores, porque unos gomeros habrán absorbido las ideas esenciales de nuestro trabajo y las habrán escrito de nuevo en su propio idioma, con sus propias costumbres, con sus propias imágenes y sin rasgos extranjeros.

Esto será un día muy feliz para Ghislaine y yo. Habremos también olvidado los trámites de pasar los obstáculos de hoy. Creemos que se trata de valores profundamente humanos, muy fuera de las diferencias culturales e idiomáticas. Esto es lo que nos da la energía de transmitir el fruto de nuestra cooperación de muchos años.

Gérard van Eyk, también de parte de Ghislaine Bromberger

San Sebastian de La Gomera, 2 diciembre 1999